Deadpool se queda a medias
Deadpool es un mal juego si miras los aspectos más técnicos del mismo: Tiene un control pobre, unos gráficos pasados con un framerate insuficiente y una jugabilidad bastante limitada. Sin embargo Deadpool también es un buen juego porque es como tienen que ser todos los videojuegos: tremendamente divertido. Con Deadpool se te pasan las horas volando delante de la pantalla gracias a un personaje, un guión y unas situaciones hilarantes. No será el juego del año pero será con el que más te rías.
Todo gira entorno a Deadpool
Que te guste Deadpool de buenas a primeras puede ser difícil si no conoces de antes a este personaje de Marvel. Es un “súper héroe” totalmente diferente a los clásicos. Es un héroe pasado de vueltas, totalmente loco de atar, salido, bastante depravado, inmoral e inmortal (lo que le confiere una autoconfianza perfecta). En el juego estas características se reflejan a la perfección, de verdad, y se hace tan bien que el videojuego se resiente… No busques un juego serio y formal, Deadpool no es así.
Lo que hace avanzar el juego hacia adelante, lo que te hace seguir más y más, no es la jugabilidad o la búsqueda del reto/desafío inherente a todo videojuego. No. Es la ristra de sandeces y brutalidades que hace y dice Deadpool en las escenas intermedias. En serio, es una locura todo lo que ves en pantalla a un ritmo de chiste/chascarrillo cada 3 segundos. No solo eso, el juego te hace participar en muchas de esas burradas pulsando uno o dos botones cuando menos te lo esperas: la escena cambiará levemente según tu opción deseada.
Pero no solo de escenas vive Deadpool. Son abrumadoras las líneas de diálogo que tiene el protagonista mientras juegas. ¡En serio, no calla nunca! Y cada mofa es más zafia que la anterior. Más aún, hay secciones del juego que están ahí única y exclusivamente para dar la nota, para hacernos reír en el sofá. Son momentos que no aportan nada a la jugabilidad pero que sin embargo lo son todo en un juego como Deadpool.
Fallos en control, cámara e IA
Deadpool es un juego de acción en tercera persona del montón. De luchas y disparos. No tiene realmente nada que destaque por encima del resto, y lo mismo ocurre en el control, que es bastante estándar.
Al principio del juego Deadpool es bastante limitado en movimientos, y el combate sufre por ello. Al principio es hasta aburrido jugar a Deadpool (si quitas los chistes, claro). Pero a la que superas dos o tres fases las habilidades mejoran. Es entonces cuando el combate es bastante más entretenido y te permite ejecutar combos mejores. Tampoco es que su sistema de juego vaya a pasar a los anales de la historia, pero decididamente el juego, como juego, mejora según avanzas.
Lo mejor: la voz de Deadpool
No se pueden ocultar los serios problemas que tiene Deadpool en el apartado visual. Desde texturas de bajar resolución, personajes repetitivos, malas animaciones de combate (no es así en las escenas) y un framerate inestable a más no poder. No es un juego que entre por los ojos y está bastante por detrás del estándar actual. Tampoco es lo peor de lo peor, en ciertos momentos el juego se luce bastante, solo que sencillamente te esperas algo más trabajado para los tiempos que corren.
Otro cantar son las escenas en las que no juegas. Creadas con el mismo motor de juego que tienen más gracia y más dedicación que el resto de la aventura.
A destacar especialmente la voz de loco de Deadpool, muy acertada, y que si hubiera sido diferente la mitad de los chistes no tendrían gracia. Es en inglés, por supuesto, pero aun así el trabajo en la voz del personaje es tan bueno que trasciende al idioma.
Conclusión
Deadpool no es un juego para todos y su jugabilidad es bastante corta. La IA de los enemigos no funciona, es muy lineal, el control y la cámara fallan aquí y allá, los gráficos no lucen… vamos, que si lo que quieres es jugar a un juego de acción en tercera persona Deadpool no es para ti. ¡Pero!, si lo que buscas es pasar un rato muy divertido, riendo a carcajadas, si tienes un humor negro o si eres fan de Deadpool, entonces aquí encontrarás un poco de lo que necesitas.
